Lo confieso, no soy moderado, aunque me gustaría serlo. No entiendo cómo poder conseguirlo, pues creo que continuamente están insultando nuestras inteligencias. Ahora se trata de beatificar a Juan Pablo II para poder hacerlo santo.
Así que voy a aprovechar la pronta canonización para homenajear con tanta santidad a los represaliados argentinos, chilenos y uruguayos por las distintas juntas militares. Parece que hayamos perdido el norte. Sí, ya sé que la memoria no da para mucho, pero afortunadamente internet y artistas como León Ferrari (Buenos Aires, 1920), están para que no olvidemos los vínculos entre religión, poder y derechos humanos.
Ha sido recíproca la utilización que poder y religión han hecho respectivamente entre sí: en 1965 León Ferrari presenta una primera denuncia con un Cristo crucificado en un bombardero estadounidense. También será su primera obra censurada, pues no llegó a exponerse.
Posteriormente continuará denunciando las apropiaciones entre violencia y religión:
Observador privilegiado, como argentino, del tristemente famoso Triángulo de la muerte, León Ferrari ha sabido expresar las crueldades que estos asesinos y criminales realizaron, amparados por el silencio de aquellos cobardes que temían más por su posición que por la justicia, a pesar de haber tenido que representar a su Dios:
La verdad es que después de ver tanta atrocidad sin justicia, tanto criminal impune muriendo plácidamente en su cama, sirviéndose del Estado de Derecho para exigir constitucionalidad y un trato adecuado a los Derechos Humanos…..
Beatificación Súbita!
Por su contribución a erradicar el problema de la superpoblación, el hambre y el SIDA. |
Por no haber quebrado su voz ante la muerte, los pederastas y los dictadores |
¡Ascienda al Olimpo de los Santos!
Ver vídeo:
Fuentes.
Todas las imágenes mostradas se encuentran en la página oficial de León Ferrari. Son obras suyas. La narración ha sido un montaje mío, no del autor.
Vaya nuestro agradecimiento: http://www.leonferrari.com.ar/
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